Durante los últimos meses, múltiples compañías en Estados Unidos han optado por disminuir o suprimir sus iniciativas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) como resultado de presiones tanto políticas como sociales. Entre estas empresas se encuentran Target, BlackRock, Bank of America y Wells Fargo.
En los últimos meses, varias empresas estadounidenses han decidido reducir o eliminar sus programas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) debido a presiones políticas y sociales. Entre ellas se encuentran Target, BlackRock, Bank of America y Wells Fargo.
Target y la reducción de sus iniciativas DEI
BlackRock y Bank of America modifican sus políticas
BlackRock, el gestor de activos más grande del mundo, ha eliminado sus metas de DEI y ha formado un nuevo grupo llamado «talento y cultura». Esta medida sigue los cambios en el contexto legal y político de Estados Unidos tras la reelección del presidente Donald Trump. En un memorando interno, BlackRock señaló que ya no será necesario que los gerentes de contratación evalúen una lista diversa de candidatos para los empleos y que el personal enfocado en DEI se integrará en un nuevo equipo de talento y cultura.
Por otro lado, Bank of America ha removido sus políticas de DEI en el contexto de la campaña de la Casa Blanca contra las prácticas «woke» en corporaciones estadounidenses. Informes reguladores indican que la compañía ha retirado el lenguaje que fomentaba la representación de minorías. Esta acción coincide con una orden ejecutiva del presidente Trump que instruye al fiscal general a erradicar las políticas de DEI en el sector privado.
Wells Fargo y otros bancos adoptan la misma dirección
Wells Fargo ha terminado una política que exigía considerar una lista diversa de candidatos en la primera ronda de entrevistas para puestos de alto nivel en Estados Unidos. Esta decisión llega tras críticas del presidente Trump, quien ha dirigido a las entidades gubernamentales y al sector privado a cesar la «discriminación ilegal» y ha descrito las políticas de DEI como un «fraude». Con este movimiento, Wells Fargo se alinea con otras instituciones financieras, como Citigroup y Bank of America, que igualmente han recortado sus iniciativas de DEI.
Reacciones y efectos
La disminución de las iniciativas de DEI por parte de estas empresas ha provocado diversas reacciones. Por un lado, algunos grupos conservadores han celebrado las decisiones, argumentando que las iniciativas de DEI pueden ser vistas como imposiciones ideológicas. Por otro lado, activistas y defensores de la diversidad han manifestado su preocupación y desilusión. Por ejemplo, la retirada de Target en materia de DEI ha causado reacciones enérgicas y llamados a boicotear por parte de la izquierda, incluidos grupos de derechos civiles y los descendientes de uno de los fundadores de Target. Desean que Target defienda la diversidad como un objetivo profundamente arraigado en prácticas empresariales sólidas, como la empresa lo había hecho durante muchos años.
La reducción de las iniciativas de DEI por parte de estas empresas ha generado diversas reacciones. Por un lado, algunos grupos conservadores han aplaudido las medidas, argumentando que las iniciativas de DEI pueden ser percibidas como imposiciones ideológicas. Por otro lado, activistas y defensores de la diversidad han expresado su preocupación y decepción. Por ejemplo, la retirada de Target en materia de DEI ha generado reacciones violentas y llamadas al boicot por parte de la izquierda, incluidos grupos de derechos civiles y los herederos de uno de los fundadores de Target. Quieren que Target defienda la diversidad como un objetivo arraigado en prácticas empresariales sólidas, como había hecho la empresa durante muchos años.
Implicaciones futuras
La reducción de las iniciativas de DEI por parte de estas empresas plantea preguntas sobre el futuro de la diversidad y la inclusión en el ámbito corporativo estadounidense. Mientras algunos argumentan que estas políticas son esenciales para promover la equidad y reflejar la diversidad de la sociedad, otros las ven como innecesarias o incluso divisivas. La evolución de este debate podría tener implicaciones significativas para la cultura empresarial y la cohesión social en los Estados Unidos.